En Colmillos y Zarpas creemos que los animales no son simples mascotas. Son familia, esos compañeros leales que te reciben con brincos después de un mal día y que, con su sola presencia, llenan la casa de alegría. Son quienes te siguen al baño como si tuvieran algo urgente que decirte, aunque probablemente solo quieran un poco más de atención. Y sí, también son los que te miran con cara de “tengo hambre”, aunque acaben de zamparse media bolsa de pienso. Porque no hay duda: los amamos.
Todo empezó con una idea sencilla: crear una tienda para quienes viven la vida con pelos en la ropa y babas en el corazón. Para quienes saben que “tener mascota” es sinónimo de compartir la vida con un ser caótico, capaz de robarte la cama, el sofá… y el alma.
Nos dimos cuenta de que muchas tiendas eran… bueno, aburridas. Serias. Demasiado perfectas. Pero, ¿y si existiera un lugar que reflejara la verdadera personalidad de nuestros peludos y de sus humanos? Así nació Colmillos y Zarpas: una tienda online pensada para los que aman los lametones inesperados, los ronroneos a medianoche y esas miradas que dicen “¿otra vez tú con la cámara?”
Aquí no encontrarás lo de siempre. Aquí encontrarás lo que emociona, lo que entretiene, lo que dura… y lo que saca una sonrisa incluso al gato más gruñón. Seleccionamos cada producto como si fuera para nuestros propios bichillos: juguetes que aguantan travesuras, snacks irresistibles, accesorios útiles y bonitos, y un montón de cosas que hacen feliz tanto a humanos como a peludos. Nada entra en la tienda sin pasar primero por el test más exigente: el de nuestras propias fieras.
Queremos que Colmillos y Zarpas sea tu tienda de confianza, pero también tu rincón de risas, ternura y descubrimiento. Porque cuando compartes tu vida con un animal, cada día tiene un poco de aventura (y un poco de desastre, seamos sinceros).
Así que si hablas con voz ridícula a tu perro, si tu gato tiene más juguetes que tú pares de calcetines, si sabes que no se puede decir “paseo” en voz alta… entonces este es tu sitio.
¡Bienvenido a Colmillos y Zarpas!
Aquí empiezan las mejores historias, a zarpazo limpio.
Nosotros nos encargamos de lo demás: de seleccionar lo mejor, de mimar cada pedido, de hacer felices a esos peludos que nos cambian la vida sin decir una sola palabra. Porque si ellos pudieran hablar, dirían: “gracias por existir”.
Y si nosotros pudiéramos maullar o ladrar, diríamos exactamente lo mismo.
En Colmillos y Zarpas creemos que los animales no son simples mascotas. Son familia, esos compañeros leales que te reciben con brincos después de un mal día y que, con su sola presencia, llenan la casa de alegría. Son quienes te siguen al baño como si tuvieran algo urgente que decirte, aunque probablemente solo quieran un poco más de atención. Y sí, también son los que te miran con cara de “tengo hambre”, aunque acaben de zamparse media bolsa de pienso. Porque no hay duda: los amamos.
Todo empezó con una idea sencilla: crear una tienda para quienes viven la vida con pelos en la ropa y babas en el corazón. Para quienes saben que “tener mascota” es sinónimo de compartir la vida con un ser caótico, capaz de robarte la cama, el sofá… y el alma.
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Aquí no encontrarás lo de siempre. Aquí encontrarás lo que emociona, lo que entretiene, lo que dura… y lo que saca una sonrisa incluso al gato más gruñón. Seleccionamos cada producto como si fuera para nuestros propios bichillos: juguetes que aguantan travesuras, snacks irresistibles, accesorios útiles y bonitos, y un montón de cosas que hacen feliz tanto a humanos como a peludos. Nada entra en la tienda sin pasar primero por el test más exigente: el de nuestras propias fieras.
Queremos que Colmillos y Zarpas sea tu tienda de confianza, pero también tu rincón de risas, ternura y descubrimiento. Porque cuando compartes tu vida con un animal, cada día tiene un poco de aventura (y un poco de desastre, seamos sinceros).
Así que si hablas con voz ridícula a tu perro, si tu gato tiene más juguetes que tú pares de calcetines, si sabes que no se puede decir “paseo” en voz alta… entonces este es tu sitio.
¡Bienvenido a Colmillos y Zarpas!
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Nosotros nos encargamos de lo demás: de seleccionar lo mejor, de mimar cada pedido, de hacer felices a esos peludos que nos cambian la vida sin decir una sola palabra. Porque si ellos pudieran hablar, dirían: “gracias por existir”.
Y si nosotros pudiéramos maullar o ladrar, diríamos exactamente lo mismo.
